La Campeona cuenta su historia de Cenicienta Boxeadora en Caras Uruguay.Nació en un hogar humilde en La Teja, la mayor de 5 hermanos, que sueña con poder vivir del boxeo, el cual practica desde los 16 años. Al terminar el liceo, se anota en la facultad de Ciencias para estudiar Bioquímica, pero se le da la oportunidad de dedicarse de forma profesional a este deporte.
Debido al exigente entrenamiento que eso requiere, no tiene otra opción que elegir. Con gran apoyo de su familia, Chris Namús (20) deja sus estudios para dedicarse a lo que más le apasiona. Por si esto fuera poco, Presidencia de la República y algunos sponsors la ayudan para que pudiera dedicarse cien por ciento a esto. Entre los beneficios que recibe, se le paga un apartamento frente al mar en pleno barrio de Pocitos, percibe una mensualidad para mantenerse y ropa deportiva, entre otros. El tiempo confirmó luego, que ni ella ni quienes la apoyaron desde un comienzo se equivocaron. Chris, apodada “El Bombón Asesino”, ganó todas las peleas en las que participó, y el pasado 12 de julio, ante un Palacio Peñarol colmado de gente hinchando por ella, se convirtió en la primera boxeadora uruguaya en ganar un título mundial. Desde ese día, su vida cambió radicalmente. Hoy, es uno de los personajes más mediáticos, la gente la reconoce, la admira, le piden autógrafos y fotos, y además es una de las chicas elegidas por Gerardo Sofovich para participar en su nuevo programa de televisión que comenzó el 3 de agosto. Pese a correr entre sus entrenamientos y las sesiones de fotos, no se olvida de sus afectos. Sentada en la peluquería, mientras se prepara para la producción de CARAS, averigua a qué florería puede llamar para enviarle un ramo a su hermana, Alexis, que cumple 14 años. “Es que la fama no me interesa -asegura la joven boxeadora- lo que más disfruto de lo que me está pasando es el cariño de la gente”.
—¿Cómo vive este momento?
—Estoy un poco desorganizada todavía, me cuesta acomodar los horarios, nunca me manejé con agenda
porque nunca tuve tanta prensa. Desde que gané el título no tuve tiempo de nada, estoy todos los días haciendo notas para diferentes medios. Por suerte, mi pareja me da una mano y me organizo un poco mejor. Ahora quiero aflojar con las notas, para poder disfrutar más todo lo que estoy viviendo, pero es una alegría enorme.
—Al ganar la pelea que la corono Campeona, le regalan una estadía en el Conrad y ahí conoce a Sofovich…
—Sí, estaba en el lobby del hotel esperando a que me pasaran a buscar de la Intendencia, y viene uno de los chicos que estaba en la puerta a decirme que estaba Sofovich y que me quería conocer. Yo pensé que era broma y me reí. Pero me paré, y lo veo que estaba ahí. Me acerqué y lo saludé. Le conté un poco de mi título y me dijo que empezaba un nuevo programa y que le gustaría que participara. Me preguntó si estaba interesada, le dije que sí, y como no afectaba mi entrenamiento, acepté. Le dejé mi número de teléfono y a las pocas horas me estaban llamando de la producción para confirmar todo.
—¿Es consciente que pueden venir otras propuestas laborales?
—No, no me puse a pensar, la verdad. De hecho en el momento me tomé muy light la propuesta de Sofovich. Empecé a caer cuando me llamaron de “Los profesionales”, de “Intrusos”. Igual el tema de la farándula, los líos que arman, no me interesa, no es lo mío, lo mío es el boxeo. Hacerlo secundario por un tema económico, sí, pero lo que me hizo llegar hasta acá fue el boxeo y es lo que me gusta.
Fuente: Caras Uruguay
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