
En plena Cuenta Regresiva,
los patines charrúas calientan
motores para debutar en el hielo.
Fotos: Carlos Uliano por Ignacio Alvarez
Junto a Virginia Dobrich los patinadores uruguayos: Carlos Uliano y Carlos San Martín llevan entre cinco y siete meses instalados en el hotel donde habitan todos los soñadores que no viven en Buenos Aires. Una vez seleccionados, los tocayos reciben cobertura médica, alojamiento gratuito y un sueldo entre 14 y 17.000 pesos uruguayos. La diferencia entre uno y otro sueldo está en si el bailarín o patinador dispone de una camioneta que lo traslade al gimnasio o pista de patinaje. Los orientales piensan construir una carrera que, al menos en Uruguay, asoma como improbable: vivir del baile o del patinaje. De hecho, los soñadores locales que han dejado una huella en este concurso de baile multiplicaron sus propuestas de trabajo.
Hasta hace un año, Carlos San Martín vivía en Punta del Este con su familia, donde se ganaba la vida como instructor de patinaje artístico y de fitness en un gimnasio que administraba. Promediando octubre, Liz Solari tuvo que viajar a la península para grabar un comercial de shampoo. En ese entonces, la modelo cursaba las instancias finales de Bailando 2007 y la producción de Ideas del Sur la autorizó a viajar junto a su soñador, Daniel Meza Sánchez, para practicar las coreografías. Fruto de la casualidad, Solari y Meza Sánchez eligieron el gimnasio de San Martín. Así comenzó el periplo de este joven hasta la pista de hielo de Patinando: "Con Liz y su soñador hicimos una amistad muy linda. Ella fue la que me aconsejó que me presentar en el casting y acá estoy… empezando una nueva vida que puede llevarme a cualquier lado, porque ShowMatch es así, no sabés qué te puede deparar. Por eso, antes de venirme vendí mi auto, entregué el departamento y ahora espero lo mejor", cuenta. San Martín se calzó por primera vez los patines a los 14 años y a los tres años se convirtió en campeón nacional de patín sobre ruedas. Desde hace cinco meses entrena todos los días con Dallys Ferreyra, una modelo paraguaya con la que asegura tener una excelente relación. "No es fácil entrenar con la misma persona todos los días y más en patinaje sobre hielo, donde las caídas y los golpes son frecuentes. Somos la única pareja extranjera y no sé si nos votará el público pero me pone feliz saber que conocí a una persona de excelente calidad humana", confió.
Carlos Uliano tiene 26 años y siempre fue un apasionado del patinaje artístico, con varios títulos logrados. Pero el amateurismo que impera en Uruguay colmó su paciencia y prefiere no hablar de su currículum en el patinaje local. Siempre soñó con instalarse en Buenos Aires. De hecho, de adolescente, tras un curso de peluquería y maquillaje, fue elegido para maquillar a "Pampita" Ardohain en una importante revista de Argentina. El vínculo con personas del ambiente argentino lo condujo hasta el casting que realizó Ideas del Sur para patinar con Sabrina Ravelli, una morocha que se hizo famosa por ser la novia del jugador de Boca Juniors Nery Cardozo.
Pese a que sólo llevan tres meses de entrenamiento con la famosa, Uliano cree que conforman una pareja que dará que hablar. "Más allá de lo que mostremos en la pista vamos a dar un buen espectáculo", dice convencido.

Pese a que sólo llevan tres meses de entrenamiento con la famosa, Uliano cree que conforman una pareja que dará que hablar. "Más allá de lo que mostremos en la pista vamos a dar un buen espectáculo", dice convencido.
Fuente: El Pais
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